El calentamiento es como la tarea que mandan para casa en el colegio. Todos dicen que la han hecho y no es verdad. Pero el cuerpo humano no es como una máquina que está lista en todo momento para funcionar al cien por cien, necesita activarse poco a poco para estar preparado. Y por eso es tan importante realizar un buen calentamiento antes de hacer deporte, y para lograrlo, las cremas de efecto calor pueden ser un complemento estupendo.
Los compuestos que contienen están especialmente elegidos para generar calor en contacto con la piel, algo muy beneficioso antes de un ejercicio intenso. Son vasodilatadoras y como se aplican dando un masaje hasta que se absorban por completo, el riego sanguíneo aumenta, justo lo que se busca en el precalentamiento muscular.
En los meses de invierno las competiciones al aire libre son difíciles de encarar, sobre todo en deportes explosivos en los que se necesite desplegar el máximo potencial desde el primer momento. Las terapias de calor son una solución para sobrellevar estas situaciones y más aún si no hay demasiado tiempo para el calentamiento; poner una compresa tibia en los músculos principales o calentar con ropa larga son ejemplos sencillos que también sirven.
Cómo usar el calor contra las lesiones
Muchas lesiones se producen porque el cuerpo está frío. Al no haber hecho un correcto calentamiento, los músculos siguen tensos, y cuando llega el momento de subir el nivel, se rompen. Ahí ya no se puede hacer nada, pero el calor continúa siendo un aliado excelente en algunas ocasiones. En el crossfit, por ejemplo, son habituales los movimientos bruscos y si no se ejecutan bien se pueden producir contracturas en la espalda y dolor lumbar. Para aliviar el dolor en este tipo de lesión muscular lo que mejor va es el calor por su efecto sedante y relajante.
Sin embargo, es un error utilizarlo en inflamaciones, traumatismos con o sin hematomas y heridas abiertas. Si se utilizan estas técnicas no solo no se ayudará a solucionar el problema sino que empeorará. Y eso es exactamente lo que hay evitar ante cualquier lesión deportiva.
Es un debate frecuente entre la gente que hace deporte, ¿ante una lesión frío o calor? Aquí se han descrito algunas de las claves para decantar la balanza hacia un lado o hacia otro. Pero por encima de ganar cualquier disputa cuñadista, ha de usar el sentido común y ser consciente de que para no poner en riesgo la salud, la actividad física ha de ser responsable.